"Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión."


- ARTICULO 19. Declaración universal de los derechos humanos, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 10 de diciembre de 1948 en París

sábado, 17 de abril de 2010

MONSEÑOR WILLIAMSON




Monseñor Williamson ha cometido un grave “delito”, atreverse a dudar o negar algo que a toda persona medianamente inteligente, le parecería de toda lógica. Las cámaras de gas en el tercer Reich no pudieron existir ni de hecho existieron. Investigaciones al respecto lo avalan, ya que ni las puertas de las supuestas salas eran herméticas, ni se ha encontrado restos del veneno en cuestión, ni las declaraciones de las supuestas víctimas son coherentes, ya que se trata de un gas inflamable (se decía que entraban los guardias fumando y riendo), sin protección respiratoria (sería imposible mover esos cuerpos sin expandir el gas “asesino” y causar la propia muerte de estos) etc etc etc….
Pero ni la pura lógica, ni las matemáticas, ni el echo de haber obtenido “confesiones” bajo tortura de los supuestos ejecutores, ni siquiera la LIBERTAD DE EXPRESION, que como derecho fundamental debiera asistir a cualquier persona, pueden con la capacidad CENSORA y de REPRESIÓN, de los sometidos poderes públicos europeos (jueces, fiscales y aparato policial), todos ellos al servicio de los AMOS del Mundo.
Se puede ofender al cristianismo con todo tipo de ofensas, humillaciones y persecuciones. Se puede fomentar una Islamofobia radical que posiciona geoestratégicamente a Europa y América a favor de Israel frente a la “amenaza” de los musulmanes, también sometidos a la bota de Sión. Se pueden hacer películas y novelas que no solo fomentan el odio y la violencia contra una ideología (el nacionalismo social), si no que justifica y alienta directamente al exterminio y asesinato de estos librepensadores.
Pero revisar la historia y desmentir alguna pequeña parte de la Gran Mentira del siglo XX es perseguido sin demora. Que se preocupen los policías mercenarios del Estado Liberal, sus jueces y lacayos fiscales, en denunciar y perseguir los abusos e insultos contra los cristianos y patriotas. Que a mas altas instancias acaben con el Aparheid en Palestina, los asesinatos de colonos en Sudáfrica y la violencia de las pandillas de negros y extranjeros en toda Europa. Pero no la principal motivación es perseguir a quien se atreva a dudar de sus mitos, y sobre todo perseguir la TRADICIÓN CATÓLICA, y con mas ponzoñosa acritud la TRADICIÓN CATÓLICA PRECONCILIAR, aquella no sometida a los poderes del SIONISMO INTERNACIONAL.
Todo nuestro apoyo a Monseñor Williamson, y mi apoyo particular a la SSSPX, por su valentía, por su compromiso con la verdad, con DIOS y con la Tradicion.

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